Powered By Blogger

martes, 23 de febrero de 2010

Capítulo 5: La oficina, dos cositas


Yo nunca había trabajado en una oficina hasta hace 3 años.

El mundo de la oficina da mucho de sí y si lo ves como un hábitat hostil como me pasa a mí o no acabas de encajar como también me ocurre, pues más de sí da todavía.

Al principio de trabajar en una oficina, fueron 2 cosas las que me llamaron mucho la atención. La primera: que se enviaran mails para todo. Aunque tuvieras a tu compañer@ a menos de un metro, había que dejar constancia electrónica de cualquier tipo de memez (toner comprado, piscolabis en la mesa de al lado, nos reunimos a las 10, mejor nos reunimos a las 12...). "Por si acaso" decían mis compañeras veteranas, "todo tiene que quedar por escrito". Yo siempre pensé, ¿por si acaso qué?, ¿por si acaso tengo un ataque de amnesia?, ¿por si acaso hay una ataque nuclear y se nos funde a todos el cerebro? En fin, siempre me pareció una chorrada hasta que me metí de lleno en el mundo de la oficina, el cual puede ser como un reencuentro de ex-compañer@s de colegio: muy duro. Y ya sabéis: donde dije dijo digo diego...y llegan los problemas. Al final yo también envío mails hasta para comentar que voy al baño...y sin vergüenza confieso que formo parte de "Oficinistas Anónimos": HOLA, SOY MARIPOSA GUERRERA Y YO TAMBIÉN HE CAÍDO EN LA SECTA DEL MAIL ABSURDO DE OFICINA.

La otra cosa que me llamó sobremanera la atención, y a la cual también he sucumbido, son los puntos suspensivos. En el mundo del mail de oficina, si quieres contestar diplomáticamente sin mojarte has de poner puntos suspensivos. Veamos los ejemplos prácticos:

Mail 1: ¿Puedo cogerme el próximo lunes de fiesta?
Respuesta al mail 1: Veremos...

Mail 2: ¿Se va a confirmar el pedido de ositos de peluche?
Respuesta la mail 2: Probablemente...

Y así todo el rato...
Si es que la oficina puede ser una jungla...
llena de peligros...

5 comentarios:

  1. jajaja muy irónico y divertido sigue así que lo haces muy bien.besos

    ResponderEliminar
  2. ¡qué gracia! Yo llevo 2 años trabajando en una oficina, y me llama la atención lo mismo: tiene que quedar constancia de todo por escrito, pensé que eran paranoias de mi compañera... (ya he asumido lo de los puntos suspensivos)

    ResponderEliminar
  3. ... mi jefa debería aprender eso de los emails ... sobre todo para cuando me grita dulcemente aquello de "te he dicho no sé quéeeee!" cosa que es incierto ... pero como probarlo? ... mi palabra contra la suya... ya sabemos quien gana... no, no soy yo! ... j'adore los puntos suspensivos

    ResponderEliminar
  4. yo también soy fan de los puntos suspensivos. Y de los puntos en general, en todas sus formas y colores. De hecho lo que me gusta de los puntos son precisamente sus formas y colores, no que sean puntos. Creo que ahora los puntos ya me dan igual.

    Gracias, sofisticated, por hacerme pensar y ver lo absurdo de mis razonamientos.

    Un besooo!!

    ResponderEliminar
  5. que pasa mariposa linda!!!a ver si nos deleitas con un nuevo artículo...venga porfa
    mil besos

    ResponderEliminar